Todos estamos familiarizados con la oración del "Ángel de la guarda", el ángel guardián y custodio de cada uno. Es una oración simple, enseñada a los niños y recordada en la edad adulta para transmitírsela a nuestros hijos.
La oración nos recuerda que nuestros ángeles guardianes son intercesores poderosos que constantemente nos protegen del mal y tratan de alejarnos del pecado. Nos protegen cada día y así mismo nos brindan asistencia invisible, que generalmente nunca notamos, aunque hay casos verdaderamente asombrosos en lo que vemos, sin lugar a dudas, su asistencia.
Nuestros ángeles guardianes son nuestros verdaderos "compañeros" en la vida, diariamente están con nosotros en nuestro viaje de santidad. Si estás buscando una oración que te ayude a recordar esta hermosa realidad, aquí tienes una muy antigua, que puedes rezar diariamente y te ayudará a consolidar una relación más profunda con ellos.
ORACIÓN
Ángel de mi guarda dulce compañía
no me desampares ni de noche ni de día.
Dios te salve, Ángel de Dios,
espíritu puro y bienaventurado,
en quien resplandecen,
además otras singulares dotes
con que te ha enriquecido y adornado
la magnificencia del todopoderoso.
la magnificencia del todopoderoso.