Alabad al Justo Juez,
sea la hora en que mi Señor,
Justo Juez murió y subió a los cielos.
Mi buen Jesús, ten misericordia de mí;
el Juez Justo me guarda
y me defienda de todos mis enemigos y contrarios;
Ya es mi tiempo,
acudid a mi defensa,
permitid señor que mis enemigos
tengan ojos y no me vean,
tengan boca y no me hablen,
tengan manos y no me agarren,
tengan pies y no me alcancen.
Permitid señor que mi valor
se haga un Juan y no un San Pablo y
que por mis hazañas vaya libre
por donde quiera que fuese.