Antes de comenzar
se hierve agua con una matita de malva,
y se coloca el caldero en la habitación del enfermo,
para que aspire el vapor.
(El enfermo y los presentes
deben santiguarse
cuando se mencione el nombre de «Jesús».
Al final se rezará un Credo).
REZO:
¡Jesús, Jesús,
tres mil veces Jesús!
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Donde Jesús se nombró,
todo el mal se quitó;
donde Jesús se ha nombrado,
todo el mal sea quitado.
María parió a Jesús,
Santa Isabel a San Juan.
Así como estas palabras
son ciertas y verdaderas,
quiero quitar el mal que esta criatura tenga.
Corto agobio,
corto asma y corto asfixias
para que esta criatura
pueda respirar
sin problema ni dificultad.
¡Lo corto y lo tiro al fondo del mar,
donde ni a ti ni a mí hagan mal!
¡Amén!
¡Jesús, Jesús, Jesús!
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