¡Oh, glorioso San Pancracio,
esclarecido mártir
de nuestra sacrosanta religión!
Dignaos interceder
para que Dios Nuestro Señor
sostenga el frágil edificio de nuestra salud,
y continúe preservándonos de la enfermedad,
a fin de que nuestra vida pueda consagrarse
a la practica de los ejercicios religiosos
y a la protección de los que de nosotros dependen.
≪Padre Nuestro...≫, etc.
Ínclito San Pancracio,
≪Padre Nuestro...≫, etc.
Ínclito San Pancracio,
que por tus padecimientos en la tierra
puedes comprender el dolor del enfermo
que yace postrado en el lecho,